Si tiene un restaurante, panadería, cafetería o cualquier otro negocio, el mantenimiento adecuado de sus cocinas es fundamental. No solo prolonga la vida útil de los equipos, sino que mejora la eficiencia y la seguridad en su empresa.
Si además es de los que elegió dejar su cocina a la vista de los clientes, la adecuada limpieza también será un bonus en la percepción de su marca.
En aras de mantener la higiene es bueno la cantidad, pero también la calidad. Evite el uso de materiales abrasivos. No utilice materiales de este tipo, ni instrumentos metálicos para eliminar residuos adheridos a las superficies. Puede optar por paños húmedos y secos para asear las áreas visibles.
Las cocinas actuales cuentan con varios equipos de composición electrónica por lo que su cuidado también debe tenerse en cuenta. Evite aplicar agua directamente sobre los tableros electrónicos de los comandos. La humedad puede dañarlos.
La frecuencia de limpieza sin dudas es una tarea que deberá pactarse entre usted y sus empleados, pero siempre es recomendable tener una diaria y otra semanal. En el diario solo se lavará lo básico, mientras en la semanal puede ser más minuciosa, donde se incluyan aspectos como:
- Retirar manualmente o mecánicamente los residuos adheridos a las superficies.
- Usar compuestos químicos y orgánicos para disolver residuos y grasas acumuladas durante la cocción.
Un mantenimiento adecuado no solo prolonga la vida útil de sus equipos, sino que también garantiza la calidad y seguridad de los alimentos que prepara.
En ese sentido las asesorías y consultas a fabricadores o empresas especializadas en el montaje del equipamiento, como es el caso de GEM, también suelen ser una vía para mejorar el mantenimiento.